Las picaduras de insectos en el verano
Quizá para muchas personas una picadura, además del dolor y la molestia que provoca durante un rato, no tiene mayor importancia, pero si tu hijo es alérgico, probablemente sufrirá más de algún inconveniente...
Por eso una reacción rápida es sumamente importante en estos casos. Recuerda que las reacciones alérgicas graves a las picaduras de insectos pueden afectar muchos órganos, lo cual es conocido como anafilaxis.
Los síntomas de esta reacción alérgica, en casos de alergia extrema, pueden ser urticaria en grandes áreas del cuerpo, inflamación de la garganta o la lengua, dificultades para respirar, mareos, molestia abdominal, náusea o diarrea y una baja en la presión arterial del niño afectado. En esta situación se debe recibir atención médica rápidamente en el centro asistencial más cercano.
Cómo prevenir las picaduras
-No intentes sacar o matar a una abeja o avispa si se posan sobre su ropa o la piel de tu hijo, ya que se puede sentir amenazado y atacarlo. Que el niño permanezca inmóvil y que espere que se vaya.
- Si estás en la playa o el campo, cierra las ventanas antes de que anochezca, más aún si está la luz encendida dentro de la casa. De lo contrario, podría ingresar algún insecto indeseado.
- Sacude las toallas y la ropa antes de tomar contacto con ellas.
- Si realizas alguna actividad al aire libre, no dejes alimentos arriba de la mesa.
- Si sufre la picadura de una abeja, extrae el aguijón con mucho cuidado, para no seguir inyectando el veneno que trae adentro. Lo mejor es hacerlo con una pinza, que idealmente haya sido desinfectada antes con alcohol. Para calmar el dolor de ésta u otra picadura, lo mejor es aplicar compresas frías y limpiar con agua la zona afectada, de modo de evitar infecciones.
Fuente: Publicaciones de la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI) Revista Nutrición, Salud y Bienestar Nestlé
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